TALLER PEDAGÓGICO DE
CIENCIAS NATURALES
FECHA: 21 DE ABRIL 2017
GRADO: 6°1
HORA: 5Y 6
Encuentro: Buenas tardes para todos hoy van a conocer acerca del tema
nutrición en los seres multicelulares
Ver: ¿Que función cumple la
nutrición en los seres multicelulares?
Conocer: cómo es el proceso de nutrición en los seres multicelulares responder
el cuestionario
Hacer: Van a responder el
cuestionario
1)
Qué diferencia hay entre la nutrición en hongos y nutrición en las
plantas
2)
Cuáles son las estructuras especializada que tienen las plantas para absorber los
nutrientes
3)
Las plantas realizan la misma funciones metabólicas que los
animales? Explica tu repuesta
4)
La nutrición en los animales invertebrados y los animales vertebrados es la misma ? sí o no porque
5)
Cuál es la función de las glándulas salivales en los mamíferos
6)
Como se llama la primera parte del intestino delgado
7)
Que función cumple la savia bruta en la nutrición de las plantas
8)
De las clases de glándulas que interviene en la nutrición ¿Cuál es
la más importantes por?
9)
Qué importancia tiene el agua en la nutrición de las plantas
10)
Hacer una sopa de letras con 20 palabras teniendo en cuenta el texto
Valorar: La próxima clase
socialización de la actividad
Nutrición en hongo
Los hongos son organismos multicelulares, es
decir que pueden ser unicelulares o pluricelulares, que se alimenta mediante la
absorción, estos vegetales no pueden sintetizar su propios alimentos, viven
sobre otros organismos es por ello que se dicen que son saprofitos
o parásitos y forman líquenes. Los hongos son organismos sin clorofila, por lo que no pueden
realizar la función de fotosíntesis, obtienen sus alimentos en forma directa o
indirecta, almacenando sustancias nutritivas.
Los
cuerpos de los hongos están formados por unos filamentos
llamados hifas en la que podemos encontrar la materia orgánica donde crece
llamada micelio nutritivo, estos son los llamados hongos parecidos a un paraguas, debido a que
levantan en el aire o mecelio reproductivo. Son inmóviles pero con flujo
protoplasmático en el micelio (Los micelios son masas de filamentos ramificados
llamados hifas que constituyen el hongo). Su ciclo
de reproducción es
primordialmente sexual y asexual.
Los
procesos de nutrición en plantas
Las plantas son organismos
autótrofos que realizan fotosíntesis. Del medio en que viven obtienen agua,
sales minerales y dióxido de carbono, y utilizan la luz como fuente de energía
para fabricar su propia materia orgánica. En los organismos con organización
talofítica*, que no tienen verdaderos tejidos, el proceso de nutrición es muy
simple. Al no poseer órganos específicos para la nutrición, la incorporación de
la materia inorgánica necesaria para realizar la fotosíntesis se realiza
directamente del medio, por lo general acuático. Por el contrario, las plantas
cormofitas* presentan órganos específicos como las raíces, a través de las
cuales se realiza la absorción de agua y sales minerales del suelo, y las
hojas, que captan la luz y fijan el dióxido de carbono de la atmósfera. Además,
poseen un sistema de vasos conductores, por el que se transportan tanto las
sustancias incorporadas, como las elaboradas en la fotosíntesis. En las plantas
cormofitas, el proceso nutritivo consta de varias etapas.
Nutrición
en plantas briofitas
Las briofitas, musgos y hepáticas son considerados
las plantas más primitivas. Son vegetales estructuralmente muy sencillos que
carecen de tejidos conductores. No presentan raíz ni tallo ni hojas; aunque
tienen estructuras parecidas denominadas rizoides, corresponden a falsas
raíces; celuloides, falsos tallos, y filoides, falsas hojas. Los rizoides
realizan funciones similares a las raíces de las cormofitas, fijando el vegetal
al sustrato. Los filoides llevan a cabo funciones parecidas a las hojas, en
ellos tiene lugar la fotosíntesis. Esta estructura, que recuerda a la de
plantas cormofitas, se llama protocormofítica. Los musgos y hepáticas viven en
medios terrestres, pero necesitan ambientes con mucha humedad. Al no poseer
estructuras especializadas para la absorción, la obtención de agua y sales
minerales la realizan directamente por difusión del medio que les rodea a
través de toda su superficie. Este proceso puede producirse gracias a que sus
epitelios carecen de una cutícula* impermeable que impida la entrada, como
ocurre en los tejidos de protección de las cormofitas. El intercambio de gases
también lo realizan directamente por difusión entre sus células y el medio en
el que viven. El transporte de sustancias por el interior tiene lugar por
simple difusión de unas células a otras, y en ocasiones por transporte activo.
La
absorción en plantas cormofitas
Existen dieciséis elementos químicos
esenciales para el desarrollo de las plantas terrestres. Salvo excepciones,
todos ellos provienen del suelo. Estos bioelementos se pueden dividir en: Macronutrientes.
Se requieren en cantidades relativamente grandes, alrededor del 0,05 % del peso
seco. Micronutrientes. Se necesitan en cantidades
muy pequeñas, por lo que también se conocen como oligoelementos. En las plantas
cormofitas la incorporación de la mayoría de bioelementos se lleva a cabo en
las raíces, por medio de la absorción de agua y sales minerales del suelo.
Absorción
de agua
Las raíces mantienen el aporte continuo de
agua que las plantas necesitan para su nutrición, y compensan la pérdida de la
misma por transpiración. En algunos casos existen mecanismos de incorporación
de agua atmosférica a través de células epiteliales de otros órganos. La zona
de la raíz en la que se absorbe el agua se llama zona pilífera. Está formada
por células epiteliales con pelos absorbentes, cuyas paredes son delgadas y
carecen de cutícula, lo que le confiere una alta capacidad de absorción. La
membrana celular es la barrera semipermeable que separa el exterior del
interior celular y que determina la absorción selectiva de nutrientes. El agua
atraviesa la membrana y penetra en los pelos por ósmosis. En los suelos salinos
la concentración de solutos en el agua del terreno es superior a la que existe
en el interior de los tejidos de la raíz. Las plantas que viven en estos suelos
poseen adaptaciones especiales para obtener agua, acumulando por ejemplo sales
minerales en vacuolas de las células radiculares.
Factores
que afectan a la absorción de agua
Hay varios factores que afectan a la absorción
de agua por las raíces: La temperatura favorece los procesos del
metabolismo celular y, por tanto, incrementa la absorción. Las temperaturas
bajas la disminuyen. La mayor aireación
del suelo provoca un aumento de la superficie de absorción, formándose raíces
muy ramificadas y pelos radicales largos y numerosos. El
aumento de la cantidad de agua en el suelo favorece su entrada a las raíces,
siempre que la concentración de sales en el suelo sea inferior a la del interior
de los pelos radicales. La capacidad de retención del suelo es
importante, pues en muchos casos el agua del terreno no es agua libre o
circulante, sino que está retenida en forma de coloides. Además, en ocasiones
parte del agua queda fuertemente adherida a las partículas del suelo.
Absorción de sales minerales
La absorción de sales minerales se realiza en
forma de iones. El mecanismo de entrada es por transporte activo, y se realiza
en contra de gradiente de concentración, por lo que es necesario un gasto de
energía. Este mecanismo requiere la participación de enzimas transportadoras
que se encuentran en la membrana plasmática, introduciendo iones del exterior
al interior de las células epidérmicas y los pelos absorbentes. En muchos casos
se han observado además canales iónicos a través de la membrana que facilitan
el proceso. Existen también mecanismos por difusión e intercambio iónico sin
gasto energético. Una vez que el agua y las sales minerales han penetrado en
las células epidérmicas, forman la savia bruta, que continúa circulando
radialmente en el interior de la raíz hacia el cilindro central donde se
encuentra el xilema. El transporte hasta llegar a los vasos leñosos se puede
realizar de dos maneras: Vía A o simplástica. El agua y los solutos son
transportados por ósmosis y transporte activo de unas células a otras a través
de plasmodesmos. Vía B o apoplástica. El
movimiento se realiza por difusión simple por el exterior de la membrana
celular, y engloba las paredes celulares y los espacios intercelulares. Este
movimiento se ve interrumpido en la endodermis de la raíz, donde existen
engrosamientos de suberina entre las células, la banda de Caspary, que regulan
el paso de sustancias. Las micorrizas, asociación simbiótica de hongos y raíces
de plantas, es otro medio muy eficaz que facilita la absorción de agua y
nutrientes del suelo, especialmente fosfatos y oligoelementos. Nutrientes
Funciones moleculares
El
transporte de la savia bruta
El agua junto con las sales minerales que se
absorben en las raíces constituye la savia bruta. Esta mezcla es transportada a
lo largo de la raíz y del tallo hasta las hojas, donde parte del agua se
elimina por transpiración y otra se utiliza en la fotosíntesis. La savia bruta
es transportada de forma continua a través de los vasos que forman el tejido
leñoso o xilema. Estos vasos están constituidos por células muertas,
denominadas traqueidas, que son huecas, cilíndricas, con gruesas paredes
reforzadas por lignina y cuyos tabiques de separación entre células han
desaparecido o están perforados.
El
transporte de la savia elaborada
Las moléculas orgánicas,
principalmente glúcidos como la sacarosa, producidas en la fotosíntesis forman
la savia elaborada. El transporte de estas sustancias desde los tejidos
productores hacia todas las partes de la planta tiene lugar a través de los
vasos liberianos, o tubos cribosos, y células acompañantes del floema. Los
vasos liberianos son células vivas, alargadas, dispuestas unas a continuación
de otras, y cuyos tabiques de separación o placas cribosas están perforados por
poros a modo de criba, lo que permite la circulación de savia de una célula a
otra. Como en gran medida los compuestos orgánicos se acumulan en las raíces,
el transporte se realiza en esa dirección, aunque los frutos, las semillas y
los órganos de crecimiento, como yemas, también lo requieren. Los glúcidos y
demás componentes orgánicos producidos en el parénquima clorofílico de las
hojas pasan por transporte activo a las células acompañantes del floema, y a
través de los plasmodesmos entran dentro de los tubos cribosos.
. Mecanismos de transporte Se
conocen actualmente dos tipos de mecanismos de transporte por el floema, uno
pasivo y otro activo, que no son excluyentes entre sí. Mecanismo pasivo. Se basa en la hipótesis del
flujo de masa o flujo de presión. Según esta hipótesis, el movimiento se
realiza por medio de un gradiente de presión entre los órganos productores o
fotosintetizadores y los órganos consumidores. El aumento de glúcidos en los
tubos cribosos hace que se incremente la concentración de solutos, lo que
provoca la entrada de agua por ósmosis en los mismos. El agua procede de las
células vecinas del xilema, y como resultado de la entrada masiva de agua se
produce un empuje de la savia elaborada hacia los órganos consumidores, donde
pasan, por transporte activo, desde los tubos cribosos hacia las células que la
requieren. La consecuente disminución en la concentración de solutos hace que
el agua salga de los tubos cribosos por ósmosis a los tejidos que le
rodean. Mecanismo activo. Se basa en la hipótesis de
las corrientes intracitoplasmáticas, que considera que muchos de los compuestos
orgánicos podrían transportarse a través del citoplasma de los tubos cribosos
con consumo de energía. El movimiento de la savia elaborada es lento, ya que la
luz de los vasos liberianos está interrumpida por las placas cribosas, cuyos
huecos se taponan con calosa en las estaciones frías, interrumpiéndose el
transporte. En la primavera siguiente, la calosa se disuelve y el movimiento se
reinicia de nuevo. La intensidad del transporte se ve aumentada con las
características de los solutos, la actividad metabólica, la temperatura, la luz
y el oxígeno. La temperatura favorece el metabolismo celular, incrementando
hasta un límite determinado la velocidad. La luz incrementa la formación de
azúcares, por lo que favorece el transporte en el tallo
Función de nutrición en
animales
La
nutrición es el proceso por el cual todos los seres vivos obtienen la materia y
energía que necesitan para formar sus propias estructuras y realizar sus
funciones vitales.
Nutrición
en invertebrado
En los invertebrados inferiores (esponjas, celentéreos y
platelmintos) el tubo digestivo tiene un solo
orificio, hace a la vez de boca y de ano. La digestión es intracelular, en esa
única cavidad las células toman los nutrientes y realiza la digestión en el
interior de la célula.
Los celentéreos pueden en algunos casos de especies tener una digestión extracelular que se realiza en esa cavidad. Para capturar a sus presas sueltan unas células denominadas cnidoblastos procedentes de sus tentáculos que paralizan a la víctima, luego la introducen en su cavidad llamada gastrovascular, allí el alimento es digerido parcialmente por las células de la pared donde se completa por completo el proceso de digestión. El alimento se transmite de estas células a las vecinas.
En los invertebrados superiores se desarrolla un aparato digestivo con dos orificios y la digestión es fundamentalmente extracelular, esto es una ventaja adaptativa ya que obliga al alimento a seguir un recorrido determinado, y eso permite una especialización por zonas, las sustancias no digeridas, se eliminan sin entorpecer la entrada de alimento.
Se identifican tres tendencias evolutivas, la primera consiste en una regionalización: boca, esófago, buche, mollejas, estómago e intestino, en la segunda tendencia se nota el aumento de superficie con el desarrollo de ciegos gástricos o intestinales, y por último la tercera tendencia desarrolla una colaboración glandular (salivares, hepatopáncreas).
Los celentéreos pueden en algunos casos de especies tener una digestión extracelular que se realiza en esa cavidad. Para capturar a sus presas sueltan unas células denominadas cnidoblastos procedentes de sus tentáculos que paralizan a la víctima, luego la introducen en su cavidad llamada gastrovascular, allí el alimento es digerido parcialmente por las células de la pared donde se completa por completo el proceso de digestión. El alimento se transmite de estas células a las vecinas.
En los invertebrados superiores se desarrolla un aparato digestivo con dos orificios y la digestión es fundamentalmente extracelular, esto es una ventaja adaptativa ya que obliga al alimento a seguir un recorrido determinado, y eso permite una especialización por zonas, las sustancias no digeridas, se eliminan sin entorpecer la entrada de alimento.
Se identifican tres tendencias evolutivas, la primera consiste en una regionalización: boca, esófago, buche, mollejas, estómago e intestino, en la segunda tendencia se nota el aumento de superficie con el desarrollo de ciegos gástricos o intestinales, y por último la tercera tendencia desarrolla una colaboración glandular (salivares, hepatopáncreas).
NUTRICION EN VERTEBRADOS
El aparato digestivo es el
conjunto de órganos (boca, faringe, esófago, estómago, intestino delgado e
intestino grueso) encargados del proceso de la digestión, es decir, de la
transformación de los alimentos en sustancias más sencillas para ser
absorbidas. La función que realiza el aparato digestivo es la de transporte
(alimentos), secreción (jugos digestivos), absorción (nutrientes) y eliminación
de desechos. En el proceso de la digestión, se transforman glúcidos, lípidos y
proteínas en unidades más sencillas para que puedan ser absorbidas y
transportadas por la sangre.
En los vertebrados, a lo largo
del tubo digestivo, se han desarrollado una serie de glándulas especializadas
en la secreción de enzimas digestivas y otras sustancias que favorecen el
proceso de digestión.
Glándulas salivales. Están
situadas alrededor de la boca y en la especie humana hay tres pares: dos
parótidas, en el maxilar superior por debajo de las orejas; dos submaxilares,
en la cara interna de la mandíbula, y dos sublinguales, debajo de la lengua.
Fabrican saliva, que segregan a la boca. La saliva está formada principalmente
por agua, mucina y amilasa. La mucina hidrata, ablanda y lubrifica la comida
para facilitar la deglución y la amilasa es una enzima que digiere el almidón.
La composición de la saliva incluye lisozima, una sustancia con acción
bactericida.
Glándulas gástricas. Se
encuentran dispersas en la mucosa de las paredes del estómago. Son glándulas de
forma tubular que tienen dos tipos de células secretoras: las células
parietales, que producen ácido clorhídrico, y las células principales, que
sintetizan la enzima pepsina. Además, en toda la superficie de la mucosa
existen células caliciformes (en forma de copa), que segregan mucina, una
sustancia que lubrica y protege las paredes del medio ácido en el que se
encuentran. Glándulas intestinales. Se localizan en la
capa mucosa de las paredes del intestino.
Existen dos tipos:
Glándulas de Brünner cuyas
células producen mucina.
Glándulas de Lieberkühn, que
se encuentran en el fondo de las vellosidades intestinales y producen el jugo
intestinal formado por enzimas digestivas: disacaridasas (degradan
disacáridos), peptídicas (degradan proteínas) y nucleasas intestinales
(degradan ácidos nucleicos).
Hígado. Situado debajo del diafragma. Está
formado por células llamadas hepatocitos, que poseen una gran actividad metabólica.
Sus funciones son:
Producir y segregar bilis. – Convertir glucosa
en glucógeno y almacenarlo.
Transformar los aminoácidos excedentes en
ácidos grasos y urea.
Almacenar hierro y vitaminas. – Descodificar sustancias que entran en los alimentos, como
toxinas, alcohol y fármacos. Páncreas.
Se encuentra situado detrás del estómago. Tiene forma de hoja y está recorrido
en toda su longitud por el conducto pancreático. Es una glándula mixta, con función
exocrina y endocrina. Como órgano
exocrino, sus glándulas alveolares fabrican el jugo pancreático que se vierte
al duodeno y está formado por: tripsina, quimotripsina, nucleasas pancreáticas,
amilasa pancreática, lipasa pancreática y bicarbonato sódico, que neutraliza la
acidez del quimo. Como órgano endocrino fabrica las hormonas insulina y glucagón, que segrega a la sangre.